Aprovechando la gira europea de la Orquesta Joven de Ecuador, desde la organización de dicha agrupación nos pidieron que impartiésemos una pequeña charla para sus miembros sobre el funcionamiento de la Joven Orquesta Nacional de España, de la que nuestros fundadores Miguel Rodríguez y Miguel Galdón fueron miembros. Así el pasado 22 de mayo Miguel Rodríguez explicó a los músicos la experiencia de ser parte de la JONDE, uno de los máximos referentes culturales dentro del mundo de la música en nuestro país.
Sin embargo la charla pronto viró, gracias a las preguntas de los miembros de la Orquesta Joven de Ecuador –cuyas edades comprenden de los 10 a los 22 años–, hacia el mundo de la gestión cultural, más concretamente a la gestión de proyectos, temporalización y problemas habituales que pueden acontecer. El interés de los propios músicos deriva de las características propias de su agrupación, pues se trata de una organización privada sin ningún apoyo por parte del Estado, teniendo que sobrevivir gracias al empeño y trabajo de sus miembros haciendo suya la orquesta. Esto, que puede parecer una desventaja, no lo es tanto si hablamos de un proyecto que tan solo tiene dos años de vida, lo que le otorga la libertad de tomar la forma que los jóvenes instrumentistas ecuatorianos deseen, y por tanto responda de manera más adecuada a sus necesidades tanto formativas como sociales dentro del país.